En ocasiones nos encontramos con personas que tienen un diastema, es decir, una separación mayor de lo normal entre dientes, coloquialmente conocido como «tener las paletas separadas«. Hoy, desde Clínica Dental Miguel Ángel García Pérez e Hijos os hablamos de ellos.
El que resulta ser más visible es el que hace que haya un espacio entre los incisivos centrales superiores, diastema en el que nos vamos a centrar viendo cuáles son sus causas principales.
Las razones por las que puede producirse el diastema son diversas, empezando por la propia genética. Si los padres lo tienen, es posible que los hijos lo hereden.
Otra posibilidad sería la presencia de un frenillo labial ancho, fibroso y con inserción baja, lo que supondría un obstáculo para que se cierre el espacio.
Otra causa sería la presencia de un mesiodens entre los incisivos centrales. El mesiodens, para aquellos que nunca hayáis leído el término, es un microdiente de forma cónica o de doble cono que suele aparecer entre los incisivos centrales o detrás de ellos. Si se encuentra entre los incisivos puede hacer que se produzca un amplio diastema entre ambos.
Otro de los motivos por los que puede producirse sería por una caída o un golpe que conllevase el desplazamiento de un incisivo o ambos.
Si se tiene por herencia, el tratamiento para cerrarlo será el ortodóntico, es decir, mediante brackets u ortodoncia invisible con la intención de recolocar los dientes y, así, eliminar el espacio.
Si el motivo es el frenillo o un mesiodens, habrá que eliminar quirúrgicamente el obstáculo. Una vez hecho, el diastema se cierra por si solo en algunas ocasiones debido a la tendencia de los dientes de ir hacia delante. De no ocurrir, es lo habitual, habría que recurrir al ya mencionado tratamiento ortodóntico.
Por último, si la causa es un traumatismo, lo idóneo es tratarlo lo antes posible. Para ello, habrá que anestesiar, reposicionar el diente y fijarlo con una ferulización para mantenerlo fijo y que no se produzcan problemas.