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patologías dentales 3ª edad

Patologías dentales frecuentes en la 3ª Edad

Cuando se llega a la 3ª Edad, hay que seguir teniendo el mismo cuidado dental que se tiene en otras etapas de la vida. Hoy, desde Clínica Dental Miguel Ángel García Pérez e Hijos, os contamos cuáles son las patologías más frecuentes en los adultos mayores, así como algunas pautas para mantener una boca sana.

Patologías frecuentes en la 3ª Edad

La caries, asociada a los niños, también pueden darse en los más mayores, pero también tienen una gran presencia la gingivitis y la periodontitis. La primera, si no se trata bien, puede avanzar hasta afectar a la pulpa dental y, si se agrava, llevar a la extracción de la pieza. En lo referente a la periodontitis encontramos que no sólo las encías se ven afectadas, sino que también lo estarían los tejidos que dan soporte a los dientes. La retracción de las encías, el mal aliento, o la pérdida de dientes, son algunas de las consecuencias más significativas.

Por otra parte, la sequedad bucal también es muy frecuente entre los pacientes mayores. En muchos casos, puede ocasionarse por tomar determinados medicamentos o también por causa del alzhéimer. Sea como sea, hay que tratarla ya que, la reducción de la producción de saliva, además de provocar una sensación desagradable, dificulta la masticación y la deglución, por no decir que también aumenta el riesgo de sufrir caries.

Destacamos también las prótesis dentales, ya que, si están mal ajustadas, pueden originar úlceras, llagas y pequeñas lesiones intraorales dolorosas. Si algo de esto llega a producirse, es fundamental que todo esté controlado. Si no se curan en dos semanas, habrá que consultar con el dentista. Hay que tener presente que el cáncer oral puede darse en forma de pequeña úlcera y no hay que dejarlo sin tratar por pensar que puede no ser nada.

Recomendaciones para prevenir las patologías frecuentes en la 3ª Edad

Para prevenir que alguna de las enfermedades dentales que hemos comentado, es importante no descuidar la higiene dental:

  • El cepillado debe realizarse tras cada comida, como mínimo, durante dos minutos. También es preciso limpiar la superficie de la lengua y los espacios interdentales con cepillos interproximales o hilo dental.
  • Los enjuagues bucales, geles y esprays antisépticos solo hay que usarlos en caso de que los prescriba el dentista.
  • El cepillo de dientes debe cambiarse cada tres meses, así como guardarlo con el capuchón puesto en vertical y alejado del resto de cepillos.
  • Hay que quitarse las prótesis dentales después de cada comida y limpiarse para evitar infecciones. Lo más recomendable es que se limpien las mucosas así como los dientes remanentes.
  • Para combatir el síndrome de la boca seca o xerostomía es importante mantener la boca y los labios húmedos e hidratados.
  • La dieta sana y equilibrada es fundamental para una salud bucodental óptima. Para ello, hay que tomar abundantes frutas, verduras y proteínas para evitar el exceso de productos azucarados.
  • Realizarse periódicamente una autoexploración de la boca para prevenir la aparición del cáncer oral.