La articulación encargada de mantener unida la mandíbula con las partes laterales de nuestra cabeza es la articulación temporomandibular, esta, es fundamental para sostener la mandíbula así como las distintas funciones que realiza nuestra boca como hablar, masticar o tragar entre otras.
El desvío de esta provoca distintos problemas severos para la persona afectada por ello, provocando lesiones en los músculos colindantes que generar inflamación y dolor bucal, a esta enfermedad se le denomina disfunción temporomandibular.
Esta puede deberse a diversos factores, los más comunes son, la desviación natural de los dientes. El Bruxismo. Traumatismos externos que desvíen el disco articular. Fenómenos de estrés o tensión emocional o tratamientos dentales mal practicados.
La disfunción temporomandibular no presenta sintomatología, por lo que uno no suele ver que está en las primeras fases de esta anomalía, la forma o mejor dicho, los símbolos que pueden detallarnos que padecemos esta anomalía son:
Si usted padece todos o alguno de los síntomas mencionados, no dude en acudir al dentista a que le haga una inspección, ya que esta enfermedad la suele padecer el 30% de la población. Un diagnostico temprano impide problemas más graves, debido a que disfunción temporomandibular puede llegar a provocar pérdidas auditivas graves.